

¿Nací solo para ser ama de casa?
Somos mujeres del siglo XXI, educadas por el mundo y la sociedad para ser independientes; preparadas, luchar por defender nuestros conocimientos y capacidades, pero a la vez somos cristianas que leemos en la Biblia que debemos amar a nuestra familia, cuidar y dedicarnos al hogar. Con estas dos visiones pareciera que nos encontramos ante una controversia. ¿Debemos elegir realmente entre estas dos opciones?